azucar para engordar cogollos

Seguro que alguna vez has escuchado aquello de que hay que utilizar azúcar para engordar cogollos de marihuana. El objetivo de este post es explicar en qué consiste esta frase. ¿Qué conseguimos exactamente añadiendo azúcar a nuestras plantas? ¿Se puede hacer de forma casera sin tener que comprar nutrientes? Si estás aquí porque quieres saber como engordar cogollos, quédate que esto te va a servir.

Desde hace bastantes décadas se han utilizado abonos caseros para engordar cogollos. Azúzares, miel… una serie de trucos totalmente orgánicos que se han venido usando con el objetivo de que los cogolles estén más sanos, sean más productivos y sean de mucha más calidad.

Hoy, esto se sigue haciendo, pero además tenemos la posibilidad de realizar este proceso a través de nutrientes a base de carbohidratos cuyo objetivo es exactamente el mismo: Potenciar la floración de estos cogollos. Pero antes de profundizar en cada uno de estos métodos de engorde de cogollos, vamos a hablar sobre el efecto exacto que tiene el azúcar en esta práctica.

Sobre todo, esta sustancia es clave en el momento previo a la repdrodución. El carbono, oxígeno e hidrógeno que forman el azúcar son los que realmente benefician a la planta. De hecho, estos componentes son los que también forman los fertilizantes. Ya ha quedado claro que todo esto provoca que los cogollos de nuestras plantas de cannabis se hagan más grandes, pero su efecto no termina ahí.

-          Provoca que los cogollos se endurezcan.

-          Fortalecen también a las bacterias beneficiosas de la planta como el caso de las enzimas. Esto significa que no solo estamos hablando de beneficios concretos para el cogollo, sino que vamos un paso más allá. Pues estas bacterias son las encargadas de mantener a la planta mucho más sanas.

-          Y acabamos esta descripción con una especie de leyenda: “Utilizar azúcar en tu cultivo de marihuana acaba por endulzar el humo”. Sobre todo esta hipótesis se escuchaba al principio de que esta práctica se implementara. ¿Realidad? ¿Ficción? Lo mejor es que lo pruebes y tú mismo decidas.

Pero pasemos a la acción. Vamos a hablar de como aplicar todo esto a la práctica, ya sea a través de un método casero o del uso de algún producto concreto.

Abono casero para engordar cogollos

En cuanto a la primera opción, únicamente se trata de agregar el azúcar al agua de riego durante las últimas semanas de floración. ¿La proporción? Muchos growers, sobre todo los de la antigua ausanza, siempre lo han hecho de forma muy sencilla: Llenar un cubo de agua, añadirle el azúcar, y parar en el momento que al removerla notes un muy ligero regusto dulce.

Y respecto a los productos industriales… Lo mejor es consultar en un grow de confianza. De todas formas, ya te podemos adelantar que existen una serie de carbohidratos con los que tenemos muy buena experiencia en lo que se refiere a potenciar cogollos: Heavy Bloom, Bud XL o Sugar Royal.

En qué semana engordan más los cogollos

Vas a ver como engordan los cogollos en la 5ª semana de floración, aunque también es probable que en este mismo punto empieces a descubrir otros que están empezando a crecer en otras zonas. Si alguna vez has pensado aquello de “mis cogollos no crecen” antes de este punto, entra dentro de la normalidad, y no quieres pronunciar esa frase después de ese momento, atento.

Pues bien, esta referencia temporal que nos indica en qué semana engordan más los cogollos también nos sirve como punto de partida a la hora de empezar a utilizar nuestro engordador, ya sea comprado o más rudimentario. Desde esta 5ª semana hasta el final de la floración es cuando realmente tienen que engordar los cogollos.

Por qué no engordan los cogollos?

Pero cuidado que esto no es causa efecto. Utilizar azúcar o miel para engordar cogollos no hace que otros problemas que pueden ser la causa por la que estos no se hagan grandes. Por ejemplo, las plagas son una causa muy frecuente que provoca este problema. Así que no olvides revisarlo bien todo, y recuerda que el azúcar para engordar cogollos no deja de ser una ayuda, un extra que solo podría funcionar si tus plantas están sanas.

Esto ha sido todo por nuestra parte. A partir de aquí, solo queda que hagas la prueba y tu mismo decidas si realmente merece la pena. El debate está en la calle, ya que hay que destacar que también hay cultivadores “haters” de esta práctica. Sin embargo, muchísima gente afirma que el que lo prueba, repite. ¿Nos ponemos manos a la obra?